Para todas las familias que pertenecen a la familia San Pedro

Somos una escuela familia llena de fe y amor, desde 1878, miles de niños han venido a nosotros por una educación católica de calidad, que desarrolla su carácter y les ofrece abundantes oportunidades de éxito.

En San Pedro creemos que ustedes, como padres, son los maestros más importantes para sus hijos, inculcándoles valores como la fe, el trabajo, la perseverancia, la amabilidad y el respeto. Como educadores, actuamos como sus socios de confianza, haciendo todo lo posible para mejorar el crecimiento académico, espiritual y personal de su hijo.

Debido a que estamos comprometidos en hacer que la educación de San Pedro sea accesible para todas las familias que lo desean, observaran que nuestra matrícula es accesible y hay una generosa ayuda financiera para hacer realidad sus sueños para sus hijos. Nos encantaría dar la bienvenida a su familia a la nuestra.


Yo enseño en San Pedro por su sagrada misión: inspirar a los estudiantes académicamente, construir una comunidad diversa y apoyar el crecimiento de fe en los estudiantes. Yo no podría estar más feliz de ser parte de una gran comunidad donde los padres, maestros y voluntarios se comprometen a crear un ambiente de aprendizaje positivo para todos los estudiantes.
— Mrs. Annie Sanchez; Kindergarten teacher

Nuestro riguroso programa académico

Nuestro programa es académicamente riguroso, incorporamos los últimos métodos educativos para enfrentar a nuestros estudiantes a los desafíos y oportunidades del siglo XXI. Nuestros profesores son del más alto nivel, certificados, con excelente educación  y dedicados a su hijo.

Un día en la vida en San Pedro

Debido a que estamos enraizados a las tradiciones de educación católica, cada día comenzamos con la clase de religión para que cada uno de nuestros estudiantes fortalezca su relación con Dios, con ellos mismos y con los que lo rodean.

Posteriormente podrá observar a nuestros alumnos de segundo grado preparándose para su Primera Comunión, podrá encontrar estudiantes de tercer grado practicando las tablas de multiplicar, usando la tableta Nexus.  En la clase de quinto grado podrás encontrar a los niños reunidos alrededor de una mesa trabajando en un proyecto de ciencia. Arriba, nuestros estudiantes de secundaria están completamente inmersos en un proyecto de escritura creativa.

A lo largo del día, los estudiantes tienen tiempo suficiente para ejercitarse en su clase de educación física y durante su receso, así como permitirles que reconozcan su lado creativo con clases semanales de arte. Todos los estudiantes son desafiados a diario para enriquecer sus habilidades de pensamiento crítico y cada grado se está preparando para el futuro con varias iniciativas STEM (Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas).

Y por supuesto porque somos familia, el apoyo, el amor y los abrazos son dados generosamente por los maestros y el personal.


En que creemos

Dios está en todas las cosas y nos llama para crecer en su amor.

Nuestra escuela genera un ambiente de respeto, cuidado, comprensión y paciencia donde todos se sienten seguros y amados como preciosos hijos de Dios.

Cada niño es capaz de tener éxito.

Cuando se le dan las herramientas y los recursos necesarios, desde el amor, el cuidado y la atención a los materiales tangibles, cada niño tiene los medios y la capacidad de aprender.

Somos una familia--we are a family--con padres, estudiantes y educadores trabajando juntos.

Los padres son los primeros maestros para sus hijos y trabajando juntos con educadores, las experiencias de aprendizaje de un niño pueden ser enriquecedoras.

Todos los estudiantes y educadores aprenden y por lo tanto prosperan, en lo académico, físico, espiritual, social y emocional.  

Para que los estudiantes crezcan en forma completa, sus educadores deben estar siempre abiertos al aprendizaje y a la mejora.

Estamos llamados a servir a los demás y a nuestro mundo.

Inspiradas por el ejemplo de nuestros fundadores, las Hermanas de la Misericordia, extendemos la compasión de Dios para satisfacer las necesidades de nuestro mundo fracturado.